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| Limpiando un piso de Marmoleum. |
Las Claves
Los revestimientos de alto tráfico de Forbo-Flooring están diseñados para que sigan teniendo buen aspecto después de utilizarlos muchos años. No obstante, tendrán mejor apariencia y darán mejores resultados si se instalan y mantienen correctamente.
La mayor parte de los revestimientos para suelos Forbo llevan un acabado de fábrica que reciben al final del proceso de fabricación, para protegerlos durante la colocación. No es necesario eliminar este acabado, que constituye la base perfecta para los actuales sistemas económicos de limpieza y mantenimiento. De hecho, no lo intente, ya que puede dañar el revestimiento.
No aplique ningún barniz-cera sobre los revestimientos antiestáticos ni sobre los conductores. Igual que un automóvil necesita gasolina, aceite y mantenimiento regular para que funcione bien, un revestimiento para suelo necesita que lo limpien y recibir un programa de mantenimiento regular, ‘hecho a medida’ del nivel de rendimiento que se le exija.
Si desea recibir recomendaciones detalladas, consulte nuestro folleto sobre el sistema Forbo Floor Care, orientado principalmente hacia instalaciones no domésticas; el Catálogo de la Contrucción Forbo de este año; o escríbanos y cuéntenos sobre su duda.
- Tratamiento Inicial
Como mínimo, el instalador tendrá que dejar el lugar, una vez terminada la instalación, limpio y barrido, sin restos de adhesivos en suelo y rodapiés. La primera impresión sobre la limpieza puede tener más impacto en el cliente que horas de instalación minuciosa. En muchos casos, la preparación inicial del suelo se deja a un profesional (subcontratado o no) de la limpieza y el mantenimiento, quien cuenta con personal y equipo para hacer todo el trabajo.
La selección de un sistema de limpieza mecánico o no mecánico vendrá determinada por varios factores, como la localización, tipo de local, tamaño de las superficies, plazo y presupuesto.
COMO NORMA GENERAL, UNA SUPERFICIE MAYOR DE 100 m2 NO SE PODRÁ MANTENER ADECUADAMENTE POR MEDIOS NO-MECÁNICOS.
Una mopa genera poca fricción, y es la fricción la que remueve la suciedad adherida. Los métodos mecánicos de limpieza, que utilizan máquinas rotatorias a la velocidad adecuada para el trabajo y el color correcto de almohadilla, darán los mejores resultados (excepto en superficies muy pequeñas) en cuanto a aspecto del suelo, y serán más rentables, ya que cubren un área mayor, más rápidamente.
Si se combinan con el uso regular de un aspirador en húmedo, se pueden lograr excelentes resultados. Un método ‘en seco’ para hacer el mantenimiento regular es, tras quitar el polvo con una mopa, frotar el suelo con una almohadilla roja con una máquina de alta velocidad, que pulveriza líquido limpiador sobre las manchas más obstinadas, dando como resultado un método muy económico de mantener un buen aspecto del suelo.
Como ocurre con todos los equipos, el operario debe estar instruido en su uso y saber que es necesario limpiar las almohadillas después de utilizarlas. La limpieza en seco también es más higiénica que en húmedo, ya que la humedad constituye un caldo de cultivo para las bacterias, especialmente si las condiciones ambientales son de elevada temperatura. Un suelo húmedo también es más resbaladizo.
Si, pese a todo, la envergadura de las tareas de limpieza y la naturaleza de la suciedad hacen que sea preferible la solución de mopa húmeda, entonces recomendamos utilizar el “Sistema de Fregado con Dos Cubos” o el “Sistema de Mopa Plana”. El operario que comienza a fregar por un extremo de la sala con un solo cubo de agua y llega al otro extremo con una fregona y un cubo vacío, no ha hecho otra cosa que pintar la sala con agua sucia.
Tanto si se emplea un sistema mecánico como no mecánico, ES VITAL NO HUMEDECER EL SUELO HASTA QUE EL ADHESIVO HAYA FRAGUADO. Los adhesivos modernos para suelos necesitan 5 DÍAS antes de alcanzar el nivel de resistencia.
Una vez fraguados tienen buena resistencia ante el ataque de agua, incluso ante la mezcla alcalina de muchos líquidos de limpieza. Durante este periodo inicial, el trabajo de un instalador puede verse arruinado si no se utilizan las técnicas básicas de reducción de la humedad para la limpieza.
Aunque los puntos que siguen se aplican también al mantenimiento diario, que normalmente no será responsabilidad del instalador, éste debe conocerlos:
- Principios Básicos
- Siempre que sea posible, PREVENGA que la suciedad llegue al revestimiento. Así, le llevará menos tiempo y esfuerzo limpiar.
- Utilice LA MÍNIMA CANTIDAD DE AGUA con el objetivo de ELIMINAR EL MÁXIMO DE SUCIEDAD. Limpie en seco aquello que se pueda limpiar en seco. Es más seguro y más rentable.
- PREVENIR es mejor que curar. Una correcta preparación inicial del pavimento nos dará un elevado estándar de apariencia, que resultará económico de mantener y prolongará la vida útil del producto.
- NO DEJE NINGÚN RESIDUO ALCALINO. Muchos compuestos para limpieza son alcalinos. Es probable que den más problemas los residuos alcalinos que ningún otro factor, por tanto, termine su limpieza aclarando con agua limpia para neutralizar todas las sustancias químicas altamente alcalinas que utilice.
- NO CONTAMINE el material de mantenimiento. Utilice un código de colores para las mopas, de forma que no se contamine el material de mantenimiento.
- Medidas Preventivas
1) Felpudos y barreras anti-suciedad:
No existe un revestimiento que sea, verdaderamente, ‘sin mantenimiento’. Pero como la mayoría de la suciedad (hasta un 80%) que entra en el edificio procede de los pies de la gente, tiene sentido interponer un sistema eficaz de barrera en forma de felpudo.
También es importante que tenga su adecuado mantenimiento para que haga su labor. Un buen sistema de felpudos no impedirá totalmente que entre suciedad en el edificio, pero reducirá sustancialmente la cantidad de suciedad y facilitará el mantenimiento. Hay que llegar a un equilibrio entre los requisitos estéticos del felpudo y su función.
Los felpudos pueden ser sobrepuestos, en ocasiones suministrado por una empresa de alquiler que los cambia regularmente bajo acuerdo, o incrustados dentro de un foso para felpudos. Los felpudos incrustados tienen una función de raspado que se consigue mediante unas guías de metal y absorben el agua y la suciedad, mediante el material que esta insertado en esas guías, que puede ser sustituido cuando se estropea.
Un felpudo que sólo actúe uno o dos pasos antes de llegar al revestimiento no eliminará suficiente cantidad de suciedad. Pueden ser necesarios de 4 a 10 pasos antes de eliminar la suciedad. Si el felpudo no recibe un adecuado mantenimiento, la suciedad de los primeros pasos irá saturando gradualmente el felpudo y terminará por transferirse al revestimiento. El mantenimiento de los felpudos es similar al de la moqueta en las áreas de mucho uso, aunque deben limpiarse con mayor frecuencia.
2) Color:
La elección de color puede afectar en gran medida a la apariencia de limpieza de un suelo. En los colores muy claros se ve más la suciedad de color oscuro y viceversa. Los revestimientos con figuras geométricas y los que reproducen el mármol camuflan muy bien la suciedad.
3) Antioxidantes:
La goma negra, como la de los neumáticos de coche, contiene antioxidantes que provocan manchas permanentes de color amarillo o marrón en los revestimientos de vinilo con los que está en contacto mucho tiempo. No ponga goma o caucho en contacto permanente con revestimientos para suelos de vinilo. Si un concesionario de coches tiene el suelo de vinilo, coloque pequeños felpudos de plástico rígido bajo cada rueda.
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